Si en mi anterior artículo te expliqué como solucionar el Trastorno Obsesivo Compulsivo, hoy te hablaré sobre otro trastorno habitual.
Imagina que un día subes por la mañana en el metro y te empiezas a sentir muy extraño, empiezas a notar mucho calor, que tu corazón se vuelve loco, que late con tanta fuerza que parece que quiera salirse de tu cuerpo; la respiración también se acelera, notáis que os falta oxígeno para respirar tranquilos, empezáis a notar que la cabeza se tambalea, intentáis controlar estos síntomas pero más los intentáis controlar y más os descontroláis, querríais escapar pero no podéis huir de vosotros mismos, os sentís que estáis perdiendo el control y enloqueciendo al mismo tiempo… De repente , y sorprendiéndoos, os da un golpe en la espalda un señor que empieza a cantar y tocar en medio de la gente, y en ese mismo instante y como por arte de magia las sensaciones se desvanecen , pero te miras a las manos y notas aun el sudor frio y te das cuenta de que lo que has vivido no ha sido un sueño, ha sido real. Has tenido una crisis de ansiedad.
Mucha gente piensa que la ansiedad es una tontería, la banalizan y a menudo dicen a las personas que la padecen que no se lo crean, que todo se lo imaginan pero pocos de ellos tienen en cuenta que un miedo imaginario es mucho peor que uno real y sus efectos mucho más fuertes que cualquier realidad.
La primera vez que uno tiene un ataque de pánico lo suele confundir con un problema físico: infarto cardíaco, angina de pecho, síntomas de ictus, embolia, etc. El cuerpo se descontrola tanto, se vuelve tan loco que puedes llegar a pensar que te podrías morir por los síntomas; por ello la mayoría de las personas acaban yendo de urgencias hospitalarias. Allí y después de que les realicen las correspondientes pruebas exploratorias y no encontrar ninguna causa física que justifique el cuadro, les dicen que han padecido una crisis de ansiedad. Y las personas suelen responder: ¿seguro que me ha mirado bien? No lo puedo comprender, pero si yo no estaba nervioso!
Todos podemos sufrir una crisis de ansiedad
El miedo es una emoción básica, y los ataques de pánico son democráticos y siguen su propia lógica. Esta emoción la necesitamos para nuestra supervivencia, pero si supera un cierto umbral , se transforma en un problema porque altera los síntomas fisiológicos espontáneos del cuerpo, creando la ansiedad. Los ataques de pánico se producen cuando estos síntomas están tan alterados que la persona en ese momento siente miedo a perder el control o enloquecer o a morirse.
Padecer de crisis de ansiedad es un problema democrático porque puede afectar tanto a hombres como mujeres, a jóvenes o a mayores , a ricos o a pobres, a personas nerviosas o no nerviosas, exitosas o no, etc. Además sigue su propia lógica no ordinaria. Por ejemplo, la mayoría de veces que ataca el pánico lo hace justo en los momentos que más relajados estamos o en momentos que no solemos esperar.
Las personas que padecen este problema tienden a solucionar los problemas con intentos de solución que en vez de solucionar el problema lo mantienen y empeoran. Estas soluciones intentadas fallidas son las siguientes:
- Intento de control de las propias reacciones.
- Estrategias de evitación.
- Solicitud de ayuda y protección.
Todos podemos tener algún momento de nuestras vidas un ataque de pánico, pero llegar a desarrollar el trastorno es otra cosa. Para desarrollar un trastorno de ataque de pánico deberíamos de realizar las anteriores soluciones intentadas por un mínimo de 3 meses.
Curar los ataques de pánico sin medicación
Desde la medicina son los antidepresivos y los ansiolíticos sus herramientas para luchar contra el problema, pero ninguno de ellos lo acaba eliminando del todo, hecho que provoca que los trastornos de ansiedad se conviertan en crónicos. Las pastillas calman el problema pero no lo hacen desaparecer, la persona está como inmovilizada pero por dentro siguen sintiendo el problema.
A día de hoy conocemos perfectamente cómo funciona el problema del ataque de pánico y por lo tanto, también sabemos perfectamente cómo desprogramarlo. Gracias a la investigación-intervención realizada en el Centro de terapia breve estratégica de Arezzo por Giorgio Nardone disponemos de un protocolo de intervención con un éxito del 98%. Podemos afirmar que con la psicoterapia breve estratégica, las crisis de ansiedad se solucionan en muy breve tiempo y para siempre.
Muy resumidamente: el protocolo se basa en ayudar al paciente a que deje de poner en acto las soluciones intentadas que no funcionan y sustituirlas por nuevas soluciones que siguen la misma lógica no ordinaria del problema. La solución estratégica para estos casos es sorprendente para los pacientes y se basa en la lógica de la paradoja, con la técnica de la peor fantasía. “mira el miedo a la cara y dejará de molestarte” Sri Yukteswar
Para finalizar, recordaros la cita de G.S. Rawlings: “Estamos atados con lazos invisibles a nuestros temores. Somos el títere y el titiritero, víctimas de nuestras expectativas”
Júlia Pascual Guiteras. Psicóloga en Barcelona.
Fundadora y Directora del Centro de Terapia Breve Estratégica de Barcelona y colaboradora de Giorgio Nardone.